Una de las características más destacadas de este espacio es la Chimenea Arlet, que cuelga del techo en el centro de la sala. Su diseño cilíndrico y suspendido crea un punto focal único que complementa a la perfección las enormes vidrieras que ofrecen vistas ininterrumpidas del paisaje montañoso. Su ubicación central permite que el calor se distribuya de manera uniforme por toda la sala, creando un ambiente confortable y acogedor.
La chimenea Arlet es una declaración de elegancia minimalista, con su campana pintada en un suave tono blanco que contrasta suavemente con el entorno natural.
Es una pieza funcional, eficiente, y estéticamente impresionante que transforma por completo esta sala de estar en un oasis de tranquilidad y belleza natural en el corazón del Pirineo catalán.
Estamos encantados de haber sido parte de este proyecto y de haber creado un espacio donde nuestros clientes pueden desconectar y disfrutar de la belleza de su entorno.